MÁS DE 150 AÑOS GALOPANDO (continuación)

Hay que citar también, aunque en tono menor, a Bud - el mejor hijo de Cabure -, con 12 victorias y 12 colocados, gran stayer y barrero, protagonista de un discutido caso de doping y a Frisco, ganador en 19 ocasiones y con 33 colocados, más de 64 carreras, otro caballo de hierro que corriera en 7 temporadas, ganando en todas; y cómo no, a Faraon que emocionó con su victoria a los nueve años en el Gran Premio de Sevilla.
Hay que destacar la finura de Gloria, otra campeona de los colores azules, único ganador clásico del mediocre Amber, la cual tampoco satisfizo en el haras, aunque diera a El Santo, o la anecdótica victoria de Ming (1961), en un Gran Premio en el que no pudo venir a montar Massard, consiguiendo así Paquito Galdeano una victoria memorable e impidiendo el triplete de Nertal, que aunque no debió correr, fue tercero. Pero sobre todos éstos, destaquemos a Todo Azul (1961), aplastado siempre por toneladas de plomo a tres años y ganador a cuatro del Gran Premio con 63 kilos, y hasta de un hándicap con 65 kilos. Fue un caballo discutido, aunque en 33 actuaciones estuvo 10 veces primero y 15 colocado. Era clase y potencia reunidas, pero sin cabeza para administrarlas. Comía y corría sin tino y siempre estaba un pelín gordo. Había que esperar a la segunda mitad del año para que rindiera mejor. Su forma alocada de correr le hizo fracasar en Longchamp y encendió la polémica sobre su valor, que demostraría sobradamente en el haras donde fue un campeón.