150 AÑOS GALOPANDO (continuación)

En los primeros años había muchos caballos de color negro, cosa que hoy apenas se ven, citaremos a Nodillo, Huracan (que ganó el Gran Premio Nacional), Milton, Albest y hasta Mussolini, en cualquier caso, si alguna vez existió el caballo negro en los purasangres, éste ha sido totalmente excluido de la selección, como tampoco existen los blancos.
Lo único cierto es que sean del color que sean, los ojos son siempre castaño oscuro. Durante la Primera Gran Guerra hubo grandísimos ejemplares y España pasó a ser el principal centro mundial de galopadores y todo buen aficionado recuerda los nombres de Antivari, Roi de la Lande, Karnak, Teddy, Przemysl, Stanborough, Brunor, Ukko, Tchad, Brabant, Sacachispas, L'iser y, como no, Nouvel An.
Teddy (1913) merece citarse el primero, porque fue un caballo fabuloso, que se convertiría en jefe de raza de todos los tiempos. La Primera Guerra Mundial le impidió demostrar toda su valía en las pistas y sólo corrió 7 carreras con 5 victorias y 2 terceros, desde su debut a tres años en San Sebastián, precisamente el día en que se inauguraba el hipódromo de Lasarte. Fue calificado como el mejor caballo de la generación de la Primera Guerra Mundial considerado por los grandes criticos, en todo el mundo, y como era de esperar, franceses, italianos y sobre todo americanos, se aprobecharon de su descendencia.