HIPÓDROMO DE LA ZARZUELA

S. ULARGUI, arquitecto

Si se me diesen tres millones de pesetas por hacer un hipódromo, más del 50% lo destinaría a jardinería y urbanización, dice taxativamente el autor de este proyecto, el cual ve este tipo de instalaciones caracterizadas, fundamentalmente, por el movimiento. Las tribunas son utilizadas por poco tiempo y, por ello, en su proyecto las construcciones son las indispensables.
Se lamenta de la cifra del presupuesto y presenta muchas perspectivas coloreadas y con figuras que destacan su preocupación fundamental: las vías de accesos por amplias zonas descubiertas con profusa jardinería, que modifica y choca frontalmente con el fondo del conjunto general del monte de El Pardo.
Propone cambiar el arbolado a uno de hoja viva y crear grandes macizos de flores cuyo color contraste con el verde de la pista.
Sus construcciones no están muy definidas, son elementales, sin carácter monumental, acordes a su idea filosófica.
Ausencia total de tratamiento sobre distribución de servicios, cuadras, etc...