lunes, 1 de diciembre de 2008

LASARTE (continuación)


SIEMPRE LOS AFICIONADOS

No resulta nada extraño el pensar que el transcurrir del tiempo ha tenido que afectar, al igual que en el resto del mundo, al aficionado hípico guipuzcoano, sobre todo cuando los cambios sociales experimentados en este siglo pasado han repercutido, en el fondo y en la forma, con toda intensidad en el desarrollo de nuestra sociedad. Ese asistente de lujo a las carreras de caballos, integrado de una manera u otra en la clase dirigente, y que utilizaba el marco del hipódromo como centro de ocio, y a veces de exhibición, ha ido siendo sustituido por un núcleo de personas con motivaciones muy diversas respecto al pura sangre inglés, que abarcan desde la fuente de ingresos generada por una raza doméstica hasta la contemplación de la belleza del galope de un animal seleccionado con ese objetivo.

No hay comentarios:

 
Google